París 2024: récord de emociones en los Juegos Paralímpicos

Muy futuristas se ven los anteojos de sol del corredor paralímpico Vinicius Goncalves Rodrigues. Pero este atleta de Brasil, poseedor de un récord mundial, no logró el oro en la prueba de 100 metros en París. Su marca, 0,04 segundos por debajo de la del ganador, le valió la medalla de bronce.

Cuando el sol se pone en París, el deporte continúa. Los jugadores de fútbol para ciegos, que muestran en los Juegos Paralímpicos de París sus destrezas con un balón sonoro, tienen un escenario de lujo en esta cancha en el Stade Tour Eiffel, directamente a los pies de la Torre Eiffel.

Thomas Wandschneider, jugador de bádminton en silla de ruedas, demostró hasta dónde se puede llegar, no solo en esta jugada de la foto. Tras haber recibido numerosos triunfos y trofeos en campeonatos mundiales y europeos, ahora obtuvo en París un galardón especial: una medalla de bronce, a los 60 años.

Esta foto capta el momento en que el nadador brasileño Gabriel Geraldo dos Santos Araujo acaba de ganar la medalla de oro paralímpica en 100 metros espalda.También consiguió el máximo galardón en 50 metros espalda, y en 200 metros estilo libre. Por si fuera poco, estableció además un nuevo récord mundial con el equipo brasileño de relevos.

Arjola Dedaj se quedó a un centímetro de la medalla de bronce en salto largo. En París, muchos de los atletas ciegos o con deficiencias visuales llevan antifaces durante el torneo. Pero esta atleta italiana se destacó con su llamativa máscara con forma de mariposa.

En el rugby en silla de ruedas, los jugadores no son necesariamente muy considerados. El reglamento no permite el contacto físico, pero sí las colisiones entre sillas de ruedas. Hombres y mujeres compiten en equipos mixtos. No suele haber jugadas sucias, pero las volcaduras -como el que se ve en la foto, en un partido entre Alemania y Estados Unidos- forman parte del juego.

Desde el punto de vista deportivo, los Juegos Paralímpicos no fueron muy exitosos para el corredor Alessandro Ossola. Quizás no estaba del todo concentrado en la pista, porque al término de la carrera llegó el momento más importante para él: Ossola le pidió matrimonio a su novia, y ella le dio el "sí".

El balón es más pequeño y pesado, la cancha no es tan grande como en el fútbol convencional, pero el fútbol para ciegos es emocionante y rápido. Los jugadores se orientan por el oído. El balón lleva incorporado una especie de sonajero, los guías dan las órdenes desde fuera y los jugadores también gritan en el campo para evitar colisiones involuntarias.

Fue un gran honor. En la inauguración de los Juegos Paralímpicos, en la Plaza de la Concordia, el paratleta alemán Markus Rehm llevó la antorcha en uno de los tramos finales. "Tenía la piel erizada. Me emocioné realmente", dijo el tetracampeón paralímpico, que compitió ya en Londres, en 2012. "Fue realmente un gran momento".